Trucos para limpiar piedra de cortar

Cómo limpiar una piedra de afilar

Mary Marlowe Leverette es una de las expertas en limpieza y cuidado de tejidos más respetadas del sector, y comparte sus conocimientos sobre limpieza, lavandería y conservación de textiles. También es maestra jardinera, con más de 40 años de experiencia, y escritora desde hace más de 20.

Las encimeras de piedra no sólo añaden un toque caro a cocinas, baños y salas polivalentes, sino que son una excelente opción por su durabilidad. Tanto si elige hormigón, granito, piedra caliza, mármol, cuarzo o esteatita, es importante aprender a cuidar adecuadamente cada tipo de piedra para evitar daños. Estas son algunas de las mejores maneras de limpiar los diferentes tipos de encimeras de piedra.

Compuesto para pulir dremel

El primer paso para un cuidado y mantenimiento adecuados de la piedra es conocer la clasificación geológica y la composición de su piedra. esta información le ayudará a identificar qué productos de limpieza utilizar y cuál es la mejor manera de cuidar su piedra natural.

La piedra natural se divide en tres clasificaciones geológicas básicas según sus respectivos procesos de formación: Sedimentaria, Metamórfica e Ígnea. Además, las piedras de cada categoría pueden ser calcáreas o silíceas.

La piedra calcárea se compone principalmente de carbonato cálcico, un compuesto químico que suele encontrarse en la piedra natural, las conchas y las perlas. El carbonato cálcico es sensible a las soluciones ácidas, por lo que se recomiendan limpiadores suaves y no ácidos.

La piedra silícea, como el término indica, está compuesta principalmente de silicatos, como cuarzo, feldespato, mica, etc. Como tal, una piedra silícea es generalmente resistente a la mayoría de los ácidos que se encuentran en las cocinas, aunque no se recomiendan los limpiadores ácidos, ya que estas piedras pueden contener trazas de minerales sensibles a los ácidos.

Tallar la piedra

Las piedras para pizza suelen estar hechas de un material compuesto de cerámica que es ideal para asar y hornear a altas temperaturas. Son ideales para casi cualquier cosa que se le ocurra por su capacidad para retener y distribuir el calor uniformemente, de forma similar al hierro fundido. Una de las ventajas de utilizar una piedra para pizza en la parrilla o en el horno es que ayuda a eliminar la humedad de los productos horneados, de modo que el pan y la masa de la pizza quedan ligeros y crujientes. La superficie natural de una piedra para pizza no retiene los sabores de los alimentos, por lo que la pizza con ajo de anoche no aromatizará los bizcochos caseros de miel de esta noche. Además de para hornear, la piedra para pizza puede utilizarse para distribuir uniformemente el calor mientras se asa. Coloca una bandeja de horno sobre la piedra para pizza precalentada cuando cocines aves. Esto ayudará a dorar la parte inferior del ave, cocinando la carne oscura a un ritmo similar al de la carne de la pechuga, por lo que ambas se harán al mismo tiempo.

Cuando saque la piedra para pizza nueva del paquete por primera vez, límpiela con un paño húmedo y déjela secar toda la noche. Esto elimina cualquier posible resto del fabricante y permite que la humedad se evapore por completo.

Cómo tallar una piedra preciosa

Las piedras de afilar, también conocidas como piedras de agua o piedras de afilar, son porosas. Por eso las sumergimos en agua para rellenar las burbujas de aire. Cada empuje y tirón de la piedra de afilar crea una pasta que ayuda a afilar el cuchillo. Aunque la mayor parte de esta pasta se elimina al enjuagar la piedra de afilar, algunas partículas más finas se introducen en los poros.

Sin duda, la pasta es un factor importante que ayuda a afilar nuestros cuchillos. Sin embargo, al mismo tiempo puede jugar en nuestra contra al obstruir las burbujas de aire, convirtiéndola en una piedra de afilar sucia que necesita limpieza.

Usted sabrá cuándo debe afilar un cuchillo. No cortará tan fácilmente como antes, y el peso de la hoja jugará en su contra. Básicamente, su cuchillo le indicará que ha llegado el momento de afilarlo, y lo mismo ocurre con las piedras de afilar. Siempre que sepas dónde mirar, sabrás que ha llegado el momento de cuidar tu piedra de afilar.

Después de enjuagar la piedra de afilar y dejarla secar durante unos días, compruebe si hay pequeñas acumulaciones de limaduras en la superficie. No tienen por qué ser las limaduras minerales que salieron de la piedra. El metal retirado del filo de la hoja para crear una nueva más afilada también puede obstruir los poros. Dependiendo del tipo de acero, incluso se pueden ver estas motas de metal brillando en la piedra de afilar.