Como conseguir cristales limpios trucos

Qué cristales pueden ir al sol

La limpieza de los cristales es una parte necesaria, pero a menudo ignorada, de la posesión de cristales curativos y piedras preciosas. Al absorber toxinas constantemente, no es raro que nuestros cristales curativos se obstruyan y necesiten una buena limpieza. Cuando trabajan tan duro para mantenernos protegidos, ¡limpiar nuestros cristales es lo menos que podemos hacer por esas pequeñas y poderosas rocas!

Hay signos físicos más evidentes de que tus piedras preciosas necesitan una renovación. Si crees que a tus piedras les falta un poco de brillo, puede ser una señal de que es hora de prestarles un poco de atención. También si puede ver alguna marca o aceite en la superficie, éste es otro indicador para usted.

Para racimos más dentados y complejos como los racimos de amatista, puedes ver polvo acumulándose en los surcos u otros trozos de suciedad y escombros, esta es otra señal de que tu cristal curativo necesita desatascarse.

Además de los signos físicos de necesitar una limpieza, tus piedras preciosas también mostrarán signos no físicos de que están listas para un poco de atención. Como sabes, algunas piedras te atraerán más que otras, dependiendo del momento en que más las necesites. Simplemente pasando la mano por encima de tus colecciones, puede que te sientas más atraído por aquellas que más te necesitan o que sientas que hay una falta de energía que emana de otras, lo cual, de nuevo, es una señal a la que debes prestar atención.

Qué cristales pueden cargarse a la luz de la luna

Puede que no sea imparcial, pero los cristales son la decoración del hogar más impresionante... pulidos, en bruto, grandes o pequeños, siempre tienen el aspecto más alegre en cualquier habitación de la casa, ¡por no hablar de toda la buena energía que aportan! Pero, ¿qué hacer cuando esa capa de polvo empieza a asentarse y las que una vez fueron tus chispitas empiezan a parecer un poco tristes y apagadas?

"¿Con qué puedo limpiarlos?", "¿Qué paño debo usar?", "¿Necesito/puedo usar algún detergente?" y "¿Qué pasa con todas esas pequeñas grietas y hendiduras de las piezas en bruto?" Estas son sólo algunas de las preguntas que me hacen con frecuencia sobre la limpieza de cristales y por una buena razón, algunos cristales no se pueden mojar y algunos son tan delicados que usar un paño con ellos es, como mínimo, desesperante.

Llevo años limpiando cristales y me gusta pensar que he cometido todos los errores posibles para que tú no tengas que hacerlo. Por eso he decidido escribir este post con todos mis consejos y trucos favoritos para mantener tus preciosas piezas brillantes durante todo el año sin ninguna baja.

Cristales de limpieza invisalign

Como ya se ha mencionado, éste es el método más sencillo para cultivar cristales. Prepara una solución casi saturada de tu compuesto en un disolvente adecuado, transfiere al menos un par de mililitros a un recipiente limpio, idealmente con una superficie grande, y tápalo. Sin embargo, no lo cubras demasiado (el papel de aluminio con algunos agujeros perforados parece funcionar muy bien), ya que quieres que el disolvente se evapore en los días siguientes. Aparta el recipiente y perturba el experimento lo menos posible (recuerda: la vibración puede provocar la nucleación).

Prepara una solución casi saturada de tu compuesto en el punto de ebullición del disolvente de tu elección o cerca de él. Transfiera la solución a un recipiente limpio y tápelo. Coloque el recipiente en un baño de calor a aproximadamente la misma temperatura y deje que se enfríe lentamente. Un Dewar con agua caliente suele servir.

Una variación de este método consiste en preparar una solución saturada a temperatura ambiente y colocar el recipiente en un lugar frío. Por ejemplo, el thf sigue siendo líquido a -80°C, lo que permite cultivar cristales en un baño de acetona con hielo seco (o en el congelador a -80°C).

Cómo limpiar los cristales

Esta guía te enseñará a cuidar correctamente tus nuevos tesoros geológicos, con consejos para manipularlos y limpiarlos adecuadamente. También estudiaremos los mejores lugares para exponer tus nuevos tesoros, de modo que sigan luciendo hermosos durante muchos años.

Es preferible abrir el paquete sobre un sofá, una cama u otra superficie blanda, por si le da un patatús. Algunos cristales y fósiles son muy delicados y deben tratarse como tales. Ten cuidado de retirar lentamente el material de embalaje para que los cristales no se atasquen ni se rompan al desenvolverlos.

Evite tocar o pinchar directamente los cristales delicados, ya que podrían soltarse de la matriz rocosa y desprenderse del espécimen. Cuando recoja un cristal o un fósil, intente siempre cogerlo suavemente por los lados del espécimen y, a continuación, colóquelo en la palma de la mano y acúnelo para examinarlo.

¿Tiene su roca necesidades especiales? ¿Es soluble en agua? Si es así, nunca querrá limpiarla con agua. ¿Tiene sensibilidad al color o a la luz? ¿Puede tocar físicamente otra pieza de su colección o se arañará o será arañada por otra cosa? En caso de duda, ¡pregúntenos! Escríbanos y estaremos encantados de darle algunos consejos específicos para su nueva pieza.